Heredero de una de las familias de gran tradición alfarera, Fernando Jimón se ha consagrado como maestro del barro bruñido y barro bandera por méritos propios.
Junto con su esposa María Elena López, ha consolidado un refinado trabajo tradicional y contemporáneo.Domina el pincel como pocos ; su trazo magistral queda plasmado en decorados que van de lo geométrico a lo realista.
Ya sea en miniatura o en grandes formatos, al admirar sus obras descubrimos un perfecto equilibrio entre composición y precisión minuciosa, dando como resultado un trabajo de gran calidad y belleza.